viernes, 3 de octubre de 2008

Falsos mitos

Como ya dije en mi presentación, soy un perro abandonado y adoptado, y quisiera acabar con ciertas leyendas urbanas.
  1. La excusa de abandonarnos por crecer demasíado a mi no me vale. Mi estatura y peso son ideales, apto para piso, casa de campo o chalet. Me gusta todo. Además, a mi, mientras me expliquen las Normas que quieren que cumpla, me saquen a menudo a hacer pises, oler farolas y echar unas carreras; Tan contento y agradecido.

  2. No todos los perros abandonados estamos tarados. Vuelve a insinuar eso y te muerdo un pie (ups!, ¿he dicho eso en voz alta?). En mi experiencia con los acogidos por mis amos no he tenido ningún problema con ninguno de los pesaos estos que vienen. Tampoco he conocido a ningún broncas de estos que dicen que se tiran a cualquier cuello; ya sea de cachorro humano o compañero perro. Si es cierto que cuando voy de visita al albergue los compañeros de los cheniles a veces gritan mucho. Habría que ver el comportamiento de un humano encerrado en 20m² cuando aparece alguien que puede que le saque de ahí por un rato o para siempre.

  3. Los compañeros abandonados que tienen algo contagiable a los humanos es porque no les han dado la pastilla gorda esta que sabe a rayos.. Aunque a mi me la dan con un buen trozo de salchicha y se traga bien.

Así que una breve reflexión para quienes buscáis excusas para abandonarnos en la PUT* CALLE, a la espera de que un coche haga el trabajo sucio que no os atreveis a hacer vosotros:
  • Si he crecido más de lo que esperabas, haberte informado antes de mi raza o de cómo eran de grandes mis padres. Era tu obligación, ¿yo que culpa tengo?. ¿Por qué al bigardo de tu hijo le metes a baloncesto y a mi me mandas a la calle?.

  • Si ladro mucho, tiro de la correa, hago pis donde no quieres.. y no te gusta que lo haga, ¡¡Dímelo!!. Eso sí, tendrás que explicarme tus normas en idioma perruno, de forma que yo te entienda. La mayoría de los humanos pensaís que somos bilingües y soltáis unas parrafadas que no hay quién se entere.

  • Si enfermo, tal vez sea porque no me has llevado al Vete a preguntarle qué me pasa. A ninguno nos gusta ir, pero será mejor eso que sufrir una diarrea o pegarte algún bicho por no darme la pastilla gorda. ¡Leñe, como si a mi me gustara llevar pulgas o gusanos en la tripa!.


Y para que no se te olvide, te dejo una foto de una de mis compis de piso en una visita al Vete. Quizá otro día os hable más de ella. Era mayor pero tenía unos andares de lo más sexy.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jajaja, qué guapo! en serio que me encanta cómo escribes! además, que dices las cosas como son pero con su toque de humor... supongo que Chewie te lo chiva todo... si es que... ;-)